Denominamos moneda Fiat a la moneda que un gobierno declara como moneda de curso legal. El dinero es aceptado como medio de pago y reserva de valor dentro de un país y cuenta con el respaldo total del gobierno que lo emite.
El gobierno tiene la facultad de disponer cuanta cantidad de dinero crea necesaria para lograr que la economía de su país se desarrolle y logre bienestar a su población.
Sin embargo, al ser personas las que toman las decisiones dentro de los gobiernos, éstas en general toman medidas desacertadas que terminan por perjudicar a la mayoría de los habitantes de su país. Como veremos, las monedas Fiat cumplen un ciclo en el que indefectiblemente tienden a fracasar en el tiempo. Generalmente al inicio, cuando el papel moneda se introduce en una economía, se crea un período de bonanza y crecimiento económico. A medida que pasa el tiempo, sin embargo, por motivos diversos, se sobreimprime dinero. Esto produce que la moneda vaya perdiendo valor respecto a otros activos, y consecuentemente genera inflación. Eventualmente, en muchos casos, este proceso es llevado a un extremo tal que genera no solo su propio colapso, sino también al empobrecimiento de toda una población regida por este sistema. Existen además otros factores externos que contribuyen al fracaso eventual de un sistema monetario Fiat.
Según un estudio de 775 monedas Fiat realizado por DollarDaze.org, el 20% fracasó como producto de una hiperinflación, el 21% fue destruido por una guerra, el 12% abolido por un proceso de independencia, el 24% fue reformado monetariamente y el 23% todavía se encuentra en circulación. No existe precedente de una sola moneda Fiat que haya logrado mantener su valor en el tiempo, y tal vez, de los 23% aún en circulación varios corran con la misma suerte de los ya no existen.
La Libra Esterlina
Fundada en 1694, la libra esterlina británica es la moneda Fiat más antigua aún en existencia. A juzgar por su avanzada edad de 325 años, podría considerarse como una moneda altamente exitosa. Sin embargo, su éxito es relativo. La libra británica originalmente se definió como 12 onzas de plata, por lo que hoy vale menos de 1/140 o el 0,7% de su valor original. En otras palabras, la moneda más exitosa en existencia ha perdido el 99.3% de su valor.
El Dólar Estadounidense
El dólar estadounidense abandonó el patrón oro en 1971, cuando equivalía a 1/35 de una onza de oro. Transcurridos 48 años, ya ha perdido el 97% de su valor. Sin embargo, ha durado más que el promedio de las monedas Fiat, por lo que quizás su desempeño debería ser evaluado como «mejor de lo esperado».
Algunas monedas Fiat fallidas
- El denario romano
El denario romano ofrece uno de los primeros y mejores ejemplos de fracaso de una moneda Fiat. A comienzos del siglo I d.C., el denario era una moneda romana hecha de plata pura. Para el 54 d.C., durante el reinado del emperador Nerón, el contenido de plata del denario se había reducido a aproximadamente el 94% de plata. El contenido de plata se redujo aún más al 85% para el 100 d.C. Al devaluar el contenido de plata del denario, los emperadores podían pagar sus deudas y aumentar sus riquezas también. Esta idea prosperó, y cada emperador siguiente continuó los pasos de su predecesor. Para el 218 d.C., el contenido de plata del denario era del 43%. En el año 244 d.C., el emperador Felipe el Árabe lo redujo aún más a alrededor de 0.05% de plata. Para cuando el Imperio Romano se derrumbó, el denario contenía un 0,02% de plata, y nadie más lo usó como reserva de valor o medio de intercambio. - El papel moneda chino
China comenzó a usar papel moneda en el siglo VII d.C. Al principio, usaron monedas de cobre, pero cambiaron a monedas de hierro ante una escasez de cobre de ese entonces. Desafortunadamente, el hierro fue fácil de obtener, y pronto, las monedas de hierro se produjeron en exceso, lo que finalmente llevó a su colapso.
En el siglo XI, un banco chino situado en la provincia china de Szechuan, introdujo el uso del papel como moneda. Por un tiempo funcionó bien y la gente podía cambiar la moneda de papel por seda y metales preciosos. Pero China entró más tarde en una guerra con los mongoles que resultó ser demasiado costosa, lo que finalmente llevó a la derrota de China y al colapso del papel moneda. Más adelante Kublai Khan asumió el liderazgo de China. Según lo dicho por Marco Polo, Kublai pudo unir a China, y todos los años produjo una gran cantidad de papel moneda. Continuó imprimiendo grandes cantidades hasta el punto de exceder la demanda. Eventualmente esto condujo a la caída del papel moneda que arruinó incluso a las familias ricas y causó la guerra y el caos. - Alemania Primera Guerra Mundial
Después del final de la Primera Guerra Mundial, precisamente en 1922, Alemania no podía pagar las reparaciones de guerra establecidas por el Tratado de Versalles. Debido a esto, los ejércitos belgas y franceses respondieron ocupando las áreas más productivas e industrializadas de Alemania. Esto ejerció una presión adicional sobre la ya frágil economía de Alemania. Para salvar la situación, el gobierno alemán puso a trabajar sus impresoras para producir dinero extra que podría utilizar para pagar la deuda y también para pagar a los trabajadores alemanes. Pronto, había demasiado dinero en circulación en la región, lo que llevó a la hiperinflación que hizo que el dinero no valiera nada. El dinero ya no era útil y se usaba para calentar hornos. - Livres, Asignaciones y franco francés
Francia ha sido notoriamente infructuosa en sus intentos por crear monedas Fiat. El Rey Sol Luis XIV dejó el país con una deuda de 3 millones de libras. Su sucesor, Luis XV necesitaba una forma de pagar la deuda y procedió a la sobreimpresión, provocando su colapso rápidamente.
En el siglo XVIII, Francia tuvo otra oportunidad con el dinero Fiat al introducir la Asignación. Sin embargo, para 1795, la moneda había sufrido una inflación del 13,000%. Al igual que su antecesor, se derrumbó. Napoleón, más tarde, introdujo el franco oro que ayudó a resolver la situación en Francia. Sin embargo, después de 12 años, el franco había perdido 99% en valor, y también fracasó. - Fallas más recientes de monedas Fiat
Argentina tiene una historia larga de crisis financieras que no es necesario contar. En 1994, México también atravesó un período de colapso de la moneda en el que el peso perdió su valor, lo que llevó a América Latina a sufrir dificultades económicas. En 1997, el baht tailandés colapsó y extendió sus efectos a países vecinos como Filipinas, Malasia, Indonesia, Hong Kong y Corea del Sur. En 1998, el rublo ruso llevó al país a una recesión económica después de su devaluación. Se observaron efectos similares en Turquía cuando la lira turca experimentó hiperinflación. En la actualidad, Zimbabwe sigue encabezando la lista de países con las peores fallas de moneda Fiat.
Conclusión
Dado el innegable historial negativo de monedas Fiat, está claro que, en una línea de tiempo suficientemente larga, la tasa de supervivencia de la mayoría cae a cero.
Los defensores de este sistema probablemente no discutirán este hecho. Aunque sí defenderán su posición con el argumento que la disminución del valor de las monedas es manejable, ya que la pérdida de poder de compra es imperceptible y su impacto mínimo en el largo plazo. Pero como vemos, este argumento puede ser válido en el corto o mediano plazo, y sólo en países desarrollados. Los países centrales generalmente cuentan con mayor cantidad y herramientas más eficientes que los países subdesarrollados para poder gastar más allá de sus posibilidades.
Es por ello que creemos sumamente necesario pensar en adoptar sistemas monetarios alternativos que busquen mejorar los existentes. Los sistemas monetarios han evolucionado desde los basados en activos físicos a los basados en la política. Ninguno de los dos ha demostrado ser exitoso en lo más mínimo.
Creemos que el siguiente paso es un sistema monetario basado en las matemáticas, donde el humano no pueda meter mano en un protocolo existente e inmutable. La tecnología Blockchain y las criptomonedas plantean una solución interesante en este sentido. Sabemos que no es algo de un día para otro, pero de a poco el conocimiento sobre la tecnología y sus bondades son, cada vez, de más amplio conocimiento entre el público en general. Es cuestión de tiempo hasta que algún gobierno tome el primer paso.
Lo que también podemos concluir de lo repasado es que siempre que se derrumban las monedas Fiat, los metales preciosos como el oro y la plata generalmente han permanecido como buenas coberturas contra la inflación y la recesión económica. Hoy las criptomonedas, como el Bitcoin, se plantean como una alternativa al oro o a los activos físicos como resguardo de valor. Muchos ya lo entienden así y ya comenzaron a atesorar la criptomoneda. También creemos que es cuestión de tiempo, aunque en este caso mucho menor al anterior mencionado, hasta que el general de la gente tome nota de esto y comience a demandar activos digitales como resguardo de valor de su dinero.